Vivir en una ciudad como Bilbao te regala cientos de oportunidades para socializar, realizar visitas culturales o disfrutar de distintas opciones gastronómicas. Sin embargo, muchas veces una ciudad es lo contrario a tranquilidad, desconexión y aire puro. Desplazarte para hacer senderismo puede ser misión imposible, sobre todo en el día a día. Si te consideras amante de la naturaleza y quieres darle la vuelta a la rutina, te invito a seguir leyendo.

A veces no es necesario irse muy lejos para descubrir rincones increíbles. De hecho, Bilbao está rodeada por un enorme cinturón verde en el que proliferan montañas, verdes colinas, pastos, bosques, miradores y parques periurbanos. Este bello entorno está conectado por un sendero de largo recorrido (GR 228) llamado Anillo Verde de Bilbao. Este proyecto, nacido de la combinación de naturaleza y urbanismo, surge de la necesidad de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos y darles la oportunidad de practicar deporte al aire libre cerca de casa.

Esta Colección consta de dos etapas que recorren el Anillo Verde de Bilbao. Tiene un total de 50 kilómetros y está diseñada para completarla en un fin de semana. Sin embargo, siempre puedes adaptar la distancia a tus necesidades o dividir el itinerario en distintos tramos para recorrer en otras ocasiones. Ten en cuenta que el trazado pasa por zonas cercanas a la ciudad, por lo que puedes parar en cualquier momento y tomar un tren o un autobús para finalizar el recorrido.

La Ruta te guía a través de las dos cadenas montañosas que rodean la capital vizcaína: Pagasarri y Artxanda. También tienes la ocasión de visitar los parques forestales de Monte Avril y Arraiz, entre otros, y montes como el Kobetamendi y el Ganeta. Estos escenarios te regalan, en todo momento, asombrosas panorámicas que aumentan el contraste entre la naturaleza y la ciudad.

Si decides realizar las etapas tal como las expongo, debes tener en cuenta la distancia y el desnivel. Cada día, el desnivel acumulado supera los 1000 metros. Es importante contar con cierta experiencia para completar la aventura con éxito. Te recomiendo llevar bastones de trekking para no sobrecargar las rodillas, agua y comida para cada jornada, además de calzado con suela adherente y un chubasquero. Si duermes fuera en la primera etapa, recuerda reservar tu alojamiento con antelación.

El clima en Bilbao es cambiante y húmedo durante todo el año. Por este motivo, es recomendable completar el GR 228 en primavera o en otoño. Durante estas estaciones las temperaturas son más agradables y el paisaje es especialmente bonito. También se puede recorrer en verano, pero es mejor evitar las horas más cálidas del día. En cualquier caso —y sobre todo si vives en la ciudad— comprueba la predicción meteorológica antes de comenzar para asegurarte unas panorámicas espectaculares.

Si vienes desde fuera, puedes viajar a Bilbao en tren, en autobús o en avión. Hay muy buenas conexiones de transporte público, así que puedes llegar fácilmente desde cualquier ciudad de la península.

Te invito a descubrir los rincones más verdes, puros y tranquilos de los alrededores de Bilbao. Escapa del mundanal ruido de la ciudad y déjate atrapar por un escenario de paz y aire fresco.

¡Disfruta!