Cuando, como yo, creces a la sombra del Pizzo Scalino, tienes la Alta Via della Valmalenco como uno de los grandes retos de tu vida. Uno de esos retos de los que tus abuelos te hablan con respeto. Ese tipo de retos del que tus primos mayores te cuentan mitos y leyendas. En Valmalenco, estés donde estés, te basta con levantar la vista hacia el cielo para admirar los gigantes de los Alpes réticos, el Disgrazia y el Bernina. Te llaman como si fueran sirenas, prometiéndote grandes aventuras.

La Alta Via della Valmalenco es una Ruta de 110 kilómetros que discurre por todo el arco alpino de Valmalenco. Cada una de las ocho etapas te conecta de forma increíble con la naturaleza. Es una verdadera meca para senderistas con mucha experiencia, para quienes no temen los más de 7000 metros de desnivel total. Solo unos pocos se aventuran tan lejos, así que es muy fácil disfrutar del silencio, los sonidos de la naturaleza y tus propios pensamientos en este rinconcito del planeta. Aquí, solo estás tú y las montañas.

La Ruta comienza en Torre di Santa Maria, punto de llegada de otra famosa Alta Via: el Sentiero Roma (komoot.com/it-it/collection/1453329/sentiero-roma-unavventura-emozionante-di-trekking-a-2-500-metri). Cada etapa está marcada con un triángulo amarillo que a veces lleva escrito un número de identificación. Hay once refugios a lo largo de la Ruta, perfectos para recuperar energías.

Llegar a Valmalenco es sencillo. Si optas por el transporte público, coge un tren hasta Sondrio. Allí busca el autobús en dirección a Caspoggio, el cual hace una parada en Torre di Santa Maria. Si te desplazas en coche, la zona de Valmalenco cuenta con numerosos aparcamientos gratuitos y alojamiento. Sin embargo, ten en cuenta que la Ruta no empieza y termina justo en el mismo punto.

Como te puedes imaginar, para completar La Alta Via della Valmalenco tienes que estar en muy buena forma física y llevar todo lo necesario para esos días. En algunos tramos, como el cruce de la Vedretta di Caspoggio (etapa 6), es posible que necesites piolets y crampones. Prepara bien la mochila y recuerda que el tiempo en alta montaña es muy imprevisible. Antes de emprender la Ruta, infórmate sobre sus dificultades y cómo de accesible es. Además, es recomendable completar el itinerario solo en los meses de verano, que es cuando habrá menos nieve en cotas de 3000 metros. Y, sobre todo, no te pongas en marcha sin tener una plaza reservada en los refugios.

El sendero que vas a recorrer tiene una historia fascinante. Lo trazaron Giancarlo Carrara, Giancarlo Corbellini y Nemo Canetta en los años 1975 y 1976. De esta forma, se convirtió en la primera Alta Via italiana con importancia cultural. El recorrido toca todas las cumbres principales y los lugares más emblemáticos de la zona. Podrás admirar la cuenca de Chiareggio, el lago Palù, el valle de Scerscen y las presas de Campo Moro y Campo Franscia, además de los majestuosos glaciares de Disgrazia, Bernina y Scalino. Te acompañarán en todo momento prados, pastos de montaña, lagos, bosques, canteras y puertos. Prepara la mochila y las botas de montaña, y embárcate en un viaje inolvidable.