En esta Colección te propongo un viaje en bicicleta desde la hermosa ciudad de Venecia a Cortina d’Ampezzo, la perla de los Dolomitas. Con esta Ruta descubrirás el Véneto y su belleza natural, caracterizada por el mar, los ríos, lagos, los bosques y las montañas.

Con un total de 273 kilómetros, este viaje te llevará literalmente del mar a la montaña, desde el nivel cero de la laguna de Venecia hasta los 2333 metros sobre el nivel del mar del refugio Auronzo, en las Tres Cimas de Lavaredo.

Para esta Ruta he seleccionado sobre todo carreteras secundarias, caminos de tierra, carriles bici y algunos senderos fáciles, para evitar en lo posible el tráfico de coches. La bicicleta que recomiendo utilizar es una gravel, por su versatilidad entre el asfalto y la tierra. Cualquier bicicleta con ruedas anchas te servirá, ya que no hay tramos técnicos a lo largo del recorrido.

Entre los lugares más destacados que esta Ruta visita están la laguna de Venecia, la ciclovía a lo largo del Sile, los viñedos trevisanos de Prosecco, la presa de Vajont, la ciclovía Auronzo-Misurina y la vista de las Tres Cimas de Lavaredo. En las descripciones de cada etapa te lo cuento con más detalle.

He dividido este itinerario en cinco etapas, tratando de repartir el esfuerzo: las dos primeras tienden a ser más llanas, y la tercera y la cuarta son similares en cuanto a desnivel total. La última etapa, de unos 31 kilómetros, te permitirá detenerte tranquilamente a admirar Lavaredo antes de dirigirte a tu destino final: Cortina d'Ampezzo.

La mejor época para emprender este viaje es entre mayo y octubre. Sin embargo, debes comprobar la meteorología antes de salir, especialmente en la zona de los Dolomitas. Para las dos primeras etapas, recomiendo salir muy temprano por la mañana para evitar el calor húmedo de la llanura veneciana.

En las ciudades donde terminan las etapas o en los pueblos vecinos siempre encontrarás campings, hoteles, BB o refugios. Hay muchos alojamientos durante el camino, pero aun así te aconsejo que reserves con antelación, sobre todo en agosto, pues es cuando hay más visitantes.

La diferencia de temperatura entre la salida y la llegada es considerable, así que no olvides llevar ropa que te permita estar a gusto con los 30 o 35 grados de Venecia en verano, y con los 5 grados de los Dolomitas. Además, no es raro encontrar tormentas de verano en las montañas.

Por último, en lo que respecta a la movilidad, te informo de que las bicicletas no están permitidas en el centro de Venecia, por lo que el circuito parte de Piazzale Roma, el único punto de la ciudad en el que se puede pedalear. Una vez que hayas llegado a Cortina d'Ampezzo, durante el periodo estival y los fines de semana, puedes aprovechar un servicio combinado de Dolomitibus y Trenitalia para regresar a Venecia o dirigirte a otros destinos desde allí.

Para más información: dolomitibus.it/it/linee-stagionali-estivo.