El Tor des Géants es una de las carreras de trail running más difíciles y épicas del mundo: 330 kilómetros y más de 20 000 metros de desnivel positivo. Sin embargo, también puedes disfrutar de esta exigente aventura sin necesidad de competir.

He dividido esta Colección en ocho etapas que ofrecen lo mejor de ambos mundos. Así pues, estás ante un desafío de resistencia y trail que conserva la atmósfera de una experiencia de senderismo. Es necesario estar en buena forma física para afrontar este itinerario, ya que las jornadas son largas y exigentes. Además, el terreno es muy alpino e incluye muchos pasos técnicos.

La Ruta es un itinerario circular por el valle de Aosta y va en sentido contrario a las agujas del reloj. Comienza y termina en Courmayeur, al oeste. El recorrido se divide en dos partes desiguales: la primera atraviesa el sur de la región siguiendo la Alta Vía 2 durante unos 200 kilómetros, desde Courmayeur a Gressoney Saint-Jean. Una vez allí, vuelve a Courmayeur por la Alta Vía 1, sumando otros 130 kilómetros de recorrido.

El Tor des Géants pasa por algunos de los lugares más emblemáticos del valle de Aosta, como el paso de Loson —que es el punto más alto de la Ruta a 3300 metros—, el paso de Malatrà, la fortaleza de Bard y el lago Djouan. No obstante, lo que marca la diferencia es la impactante panorámica de los famosos cuatromiles alpinos. Los llamados "gigantes" (géants) de la carrera son el Mont Blanc, el Gran Paradiso, el Monte Rosa y el Cervino.

Para minimizar el peso de la mochila, cada etapa termina en uno de los refugios del camino. Además de comidas calientes y desayunos sencillos pero energéticos, cada noche encontrarás una ducha y una cama para tus músculos cansados. Es esencial usar un buen par de zapatillas de trail. Te recomiendo llevar ropa de abrigo e impermeable para hacer frente al clima de montaña, a menudo cambiante.

La mejor época para emprender esta Ruta es desde finales de junio a mediados de septiembre, que es cuando los refugios están abiertos y los días son más largos. Antes o después corres el riesgo de encontrar nieve, lo que dificultaría la marcha y la haría peligrosa.

Cada etapa comienza y termina en un refugio o en un pequeño pueblo. Es muy importante reservar todas las pernoctaciones con antelación. Cada jornada pasa por varios refugios de montaña donde puedes parar para almorzar, así que no es necesario cargar con demasiada comida. En cuanto al agua, podrás rellenar las botellas sin problema.

El recorrido empieza y termina en la rotonda de Courmayeur, junto a la parada de autobuses. Si vienes de Italia, toma el tren hasta Pré-Saint-Didier y luego el autobús hasta Courmayeur. Si vienes de Francia, dirígete a Chamonix y, una vez allí, coge un autobús hasta Courmayeur. Si, por el contrario, viajas en coche, debes saber que el casco histórico de Courmayeur es una ZTL (zona de tráfico limitado) controlada por cámaras automáticas. Sin embargo, hay varios aparcamientos en las inmediaciones.

Por último, te aconsejo que lleves dinero en efectivo, ya que muchos de los refugios situados a lo largo de la Ruta no aceptan tarjetas de crédito.

¡Vive la montaña y disfruta del viaje!