Si ya conoces el parque nacional de los Pirineos, sabes que adentrarse en sus valles significa perderse por senderos serpenteantes, subir montañas que acarician el cielo y admirar la belleza de un horizonte interminable.

Esta Colección de tres etapas se desarrolla en el parque nacional de Ordesa y Monte Perdido, un espectacular espacio natural surcado por imponentes barrancos, ríos cristalinos y majestuosos circos glaciares. Estos 38 kilómetros tratan de conectar los tramos más impresionantes del valle, de manera que asciendas a su cima más emblemática —Monte Perdido— y recorras sus famosas fajas.

Aquí los pastores se sometían a las gélidas temperaturas y a los fuertes desniveles para atravesar los valles glaciares. De esta forma, aprovechaban los caminos sin acondicionar que la naturaleza había ido trazando a lo largo de miles de años y aseguraban la supervivencia del ganado.

Esta trepidante travesía está diseñada para los espíritus más aventureros. Cada día hay que afrontar fuertes desniveles y pasos delicados o incluso aéreos. Ninguno de ellos es especialmente técnico, pero sí que requieren cierta experiencia en alta montaña, sobre todo para poder disfrutar al máximo. En la descripción de cada Ruta hay más detalles al respecto.

En cuanto al alojamiento, tienes la opción de dormir las dos noches en el refugio de Góriz o, si lo prefieres, acampar junto a él. En ambos casos, debes reservar con antelación a través de esta página: goriz.es/reservar-en-goriz. Esto te permite ahorrarte algo de peso, ya que puedes dejar el equipaje pesado en las taquillas para realizar el ascenso a Monte Perdido más cómodamente. Además, aquí pueden informarte del estado del terreno antes de comenzar.

La mejor época para realizar este recorrido es en verano, ya que los pasos expuestos son mucho más seguros al no haber ni hielo ni nieve. Asimismo, puede ser una zona muy concurrida, así que ganará encanto si evitas los fines de semana.

Consulta también el parte meteorológico; el tiempo en alta montaña es muy cambiante y las tormentas son frecuentes en verano. Planea tus comidas, lleva agua en abundancia y protección solar: una vez sobrepases cierta altura, la vegetación desaparece y es complicado resguardarse del sol.

Para llegar al punto de partida, recuerda que el acceso a Pradera de Ordesa en vehículo privado está restringido en Semana Santa, verano (de junio a noviembre) y durante el puente del Pilar. En estas fechas solo se puede llegar en el autobús de Torla-Ordesa o caminando unos siete kilómetros por el antiguo camino de Turieto. Los billetes se adquieren en el centro de visitantes de Torla, donde puedes aparcar de forma gratuita.

El parque nacional de Ordesa y Monte Perdido es mágico, salvaje y cautivador. Estoy segura de que esta aventura se quedará para siempre grabada en tu memoria, pero también puedes imprimir una foto y ponerla en tu mesilla de noche.