Grotte Saint- Marcel

Clasificada como patrimonio nacional por su interés geológico y arqueológico, la cueva de Saint-Marcel es una de las cavidades más grandes de Francia con sus 60 km de redes.
A 600 m, siguiendo las huellas del río fósil, descubrirá amplias salas y galerías finamente talladas por obras hidráulicas. Magnificada por dos espectáculos de luz y sonido, la sala de la catedral revela sus inmensas concreciones y la sublime cascada de Gours, su serie de más de cien estanques con calcita en el agua.

Fantástica gruta. El lavabo de agua con colores cambiantes y música de fondo es lo más destacado.

El sistema de cuevas de St. Marcel tiene 2 entradas naturales y una entrada artificial.
A fines de la década de 1980, se creó la entrada artificial para acercar a los visitantes a la Cueva Ampliada de manera cómoda. La entrada inferior, que se encuentra sobre el río Ardeche, está cerrada y solo es accesible a los espeleólogos.
La entrada superior (Gouffre Despessy) está abierta, pero no llegará muy lejos sin cuerdas y equipo de escalada, y la parte de la cueva del espectáculo está cerrada desde esa dirección.