Via Appia Antica

La Via Appia Antica es una de las vías consulares más famosas del mundo. Conecta Roma con Brindisi, que una vez fue la puerta de entrada a Grecia y Oriente. Grandes hechos históricos y leyendas milenarias han tenido lugar a lo largo de este camino. Como la que ve a San Pedro como protagonista antes de la fundación de la basílica del mismo nombre. El adoquín se mantiene imperturbable con el paso del tiempo y aún es posible ver los surcos dejados por los carros que transitaban por este camino. Una impresionante hazaña de ingeniería teniendo en cuenta los tiempos. Caminando a la sombra de los magníficos y altísimos pinos piñoneros de Roma, uno se olvida del tiempo y del espacio. Una inmersión en el pasado en el parque urbano más grande de Europa.

La Via Appia Antica son los restos de una ruta comercial y militar que alguna vez fue muy importante y que comenzaba en el centro de Roma (como muchas otras carreteras antiguas) y llegaba a Brindisi. La antica VA es el resto. Durante varios kilómetros discurre casi en línea recta; en algunos lugares todavía se conserva el antiguo adoquín de 2.000 años, pero la mayor parte ha sido sustituido por adoquines más nuevos de otro formato. Sin embargo, sigue siendo una calle muy interesante e incluso los coches todavía la utilizan. Sin embargo, es utilizado principalmente por peatones y ciclistas, a quienes también les gusta utilizar los senderos a izquierda y derecha de la calle. Es demasiado agotador caminar por la calle todo el tiempo.