Teilstück Römerkanal

Difícil de creer: el acueducto romano, que solía tener unos buenos 95 kilómetros de largo, abastecía a la Colonia romana con 20 millones de litros de agua dulce todos los días. Aquí aún se pueden admirar algunas reliquias de este magistral edificio.

Una buena prueba de que los romanos estaban en Eifel.

El centro de la ciudad de Rheinbach estaba completamente atravesado por el acueducto romano de Eifel. Viniendo de Palmersheim / Flamersheim, la línea giraba hacia el área de la ciudad. Incluso hoy en día, las calles Münstereifeler Straße, Kriegerstraße y la calle Römerkanal muestran aproximadamente el antiguo trazado de la ruta. Las dimensiones y el diseño del edificio en Rheinbach, que fue destruido casi por completo mediante el robo de piedra medieval, se hacen visibles en varias secciones construidas en el área de la ciudad.
Excepto el tramo de la calle Pützstrasse, todos los demás tramos construidos en la zona de la ciudad proceden de yacimientos arqueológicos del propio Rheinbach y muestran un canal de hormigón impreso (Opus caementicium). Este se realizó en un encofrado hecho de tablas de madera. El tramo construido aquí procede de Mechernich-Breitenbenden (estación 16) y muestra una técnica diferente: sus paneles laterales se fabricaron con el método de encofrado “perdido”, es decir, Es decir, en la construcción del muro no se utilizó ningún encofrado de madera, sino que el interior de las mejillas se hizo con sillares construidos a mano y la sala se construyó hasta el muro del pozo de excavación con piedras de cantera más pequeñas y con abundante argamasa. Para construir la bóveda fue necesario utilizar un andamio de madera, cuya impresión negativa se puede observar claramente en el interior de la bóveda.
El depósito de cal del interior de la tubería era muy buscado en la Edad Media porque podía utilizarse para realizar bellas piezas para decorar las iglesias románicas. Este material fue utilizado como “mármol de acueducto” en media Europa. Fuente: roemerkanal.de/bauwerk