Zau­berhaftes Wäldchen

Un camino lleno de serpentinas, resbaladizo en algunos lugares, pero una arboleda encantadora de plantas viburnum de hojas grandes. Sus umbelas venenosas no deben confundirse con el saúco comestible de casa. Más abajo, nuestro camino cruza un estrecho desfiladero sombreado por brezos y eucaliptos. Taginasts ahora se alinean en el borde derecho del camino. En la ladera rocosa de arriba se pueden ver las diferentes capas de lava: roca suelta se alterna con bloques sólidos de basalto. Después de fuertes lluvias, se esperan caídas de rocas.