St. Goar

Bonito pueblecito con casas de entramado de madera muy bonitas y el castillo de Rheinfels, que merece la pena visitar.

Pequeña ciudad muy bonita en el Rin. Las ruinas del castillo de Rheinfels se encuentran sobre la ciudad.
Pintoresco pueblo con entramado de madera a la sombra de un imponente castillo del Rin
Fue a principios del siglo VI cuando un joven sacerdote del sur de Francia llegó al Rin y se instaló como ermitaño en una cueva rocosa. Con el permiso del arzobispo de Trier, Goar construyó un albergue para barqueros del Rin y comenzó a evangelizarlos. Tras su muerte fue canonizado y su tumba se convirtió en lugar de peregrinación. Finalmente, 700 años después, St. Goar recibió los derechos de ciudad. Hoy en día, la pintoresca ciudad con entramado de madera forma parte del Patrimonio de la Humanidad del Medio Rin y se encuentra a la sombra del castillo de Rheinfels.
¡Definitivamente vale la pena verlo!

La tarta del Café St.Goar merece la pena, ¡absolutamente recomendable!