Aussichtsturm Kniepenberg

¡Bueno, eso es casi como una montaña! Después de todo, sube más de 50 metros de altura, bastante notable para el extremo norte y en realidad un poco sudoroso. Y lo mejor de todo: ¡aún hay más! Porque encima del "Kniepenberg" hay una torre de vigilancia a una altura de 86 metros, con la que puedes sumar otros 16 metros y aterrizar en 102 metros. Si no está demasiado nublado, la vista aquí arriba es fantástica. En particular, la vista de la llanura aluvial del Elba solo vale la pena subir.

Incluso si el camino hasta aquí con la bicicleta de trekking es muy difícil... pero la fantástica vista sobre el Elba compensa el esfuerzo.

La vista recompensa el esfuerzo por llegar.
La torre es súper estable y aunque no me gusta mucho la altura, me sentí segura.