Wallfahrtsbasilika Vierzehnheiligen

La pequeña ciudad de Vierzehnheiligen en realidad consta de solo un puñado de edificios, la imponente basílica barroca, el monasterio, una cervecería con deliciosas cervezas, otras dos posadas, la casa diocesana y una escuela de economía doméstica.

La basílica de peregrinación barroca de los Catorce Santos fue construida por el famoso arquitecto Balthasar Neumann y fue completamente renovada hace solo unos años. Desde el siglo XV hasta la actualidad, los peregrinos acuden a los Catorce Santos, uno de los lugares de peregrinación más famosos, para pedir la protección de los 14 Santos Auxiliadores. En aquel entonces, hace más de 500 años, un pastor tuvo una aparición que se convertiría en la piedra angular de una de las iglesias de peregrinación más famosas de Baviera. La basílica fue construida en el siglo XVIII, es uno de los edificios barrocos más importantes de Baviera.

La basílica de peregrinación barroca de los Catorce Santos fue construida por el famoso arquitecto Balthasar Neumann y fue completamente renovada hace solo unos años. Desde el siglo XV hasta la actualidad, los peregrinos acuden a los Catorce Santos, uno de los lugares de peregrinación más famosos, para pedir la protección de los 14 Santos Auxiliadores. En aquel entonces, hace más de 500 años, un pastor tuvo una aparición que se convertiría en la piedra angular de una de las iglesias de peregrinación más famosas de Baviera. La basílica fue construida en el siglo XVIII, es uno de los edificios barrocos más importantes de Baviera.

Pequeña historia paralela:
Al planificar los Catorce Santos, Balthasar Neuman prometió construir la basílica de tal manera que el Monasterio de Banz encajara en la puerta del edificio. Después de la finalización, los clientes, por supuesto, estaban decepcionados. El tamaño de la basílica no es exagerado. ¿O crees que hay sitio para Kloster Banz en la puerta?

De hecho, ¡el monasterio tiene espacio en él! Si miras a través de la puerta del altar mayor, ves el monasterio enfrente. Así que Balthasar Neumann cumplió su promesa: el Monasterio de Banz encaja en la puerta de la Basílica de los Catorce Santos Auxiliadores.