Kaiser-Max-Grotte

Corría el año 1484 cuando el emperador Maximiliano, todavía hoy muy popular en el Tirol, se extravió cazando en Martinswand y no pudo avanzar ni retroceder. Su refugio era una gruta de la que fue rescatado después de 2 días por un joven campesino. El niño desapareció después de que el emperador fuera rescatado, y no pasó mucho tiempo antes de que la gente comenzara a decir que un ángel había encontrado a Maximiliano y lo había llevado de regreso al valle con buena salud. Además, se dice que Maximiliano, en espera ansiosa de ayuda, rogó "si tan solo kematen", que se dice que es la razón por la que la ciudad vecina de Zirl ahora se llama Kematen. Estas leyendas todavía se cuentan hoy. En cualquier caso, el emperador hizo erigir una cruz en la cueva conocida como gruta de Maximiliano como agradecimiento por el final feliz de su viaje de caza.(tirol-infos.at/innsbruck/kaiser-max-grotte.html)

Es mejor llevar un casco contigo si solo vas de excursión a los dioses.