Brennender Berg

En todo caso, este espectáculo natural solo se puede ver en los días fríos.
Pero el entorno es muy bonito y también merece la pena pasar por el pequeño desfiladero.

Muy buena actuación. Estuve allí a menos 1 grados. Entonces puedes ver el humo. Desafortunadamente, no se puede ver en temperaturas más cálidas.

Incluso Goethe caminó aquí en 1770. Cuando estuvimos allí, ya no nos dimos cuenta de la veta de carbón humeante. Todavía había que adivinar un ligero olor a azufre.