Hochmoor von Soos

Aquí puedes encontrar los horarios y precios

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El principal atractivo de la reserva son los manantiales minerales y las chimeneas de dióxido de carbono (CO2), las llamadas mofettes. Las mofettes parecen pequeños cráteres volcánicos, de un tamaño máximo de medio metro. De algunos el gas sale con un silbido, mientras que de otros burbujea agua y lodo (“falsos volcanes de lodo”). Cuando llueve se llenan de agua; cuando se congela se forman drusas de cristales de hielo, pirámides de hielo y columnas. Durante los períodos secos, las superficies se agrietan y se cubren de eflorescencias de sales minerales de color amarillento o blanco.

El páramo alto me recordó en parte a Yellowstone, en muchos lugares brota del suelo y huele a azufre.

Un hermoso lugar que debe ser visitado una vez en las cuatro estaciones.
Cuesta unas pocas coronas entrar, puedes pagar con euros pero debes recordar que solo puedes pagar con billetes y te devuelven el cambio en coronas. Los perros son muy bienvenidos aquí. No se puede acceder al páramo en bicicleta, pero se puede estacionar en el lugar. No es un problema para los niños con bicicletas sin pedales.