Ermita de la Salut

Una ermita del siglo IX, reformada el siglo XI, es realmente bonita, en un paraje acogedor dentro de un espacio cuidado y tranquilo, ideal para subir a verla entre semana y descansar allí un buen rato.

Un destino muy bonito.

La ermita está documentada desde finales del s. IX donde en un pergamino del archivo capitular de la sede de Barcelona cita la actual ermita bajo el nombre de "parroquia de Santa Madrona". Sin embargo, en el siglo XIV la dedicación cambió a San Pedro y actualmente está dedicada a la Virgen de la Salud.

Es una construcción sencilla, con poca decoración, pero con un estado de conservación excelente. El edificio en un primer momento era de nave única, con posible cabecera cuadrangular y una cubierta de madera que data del s. X. En una ampliación en el s. XI se añadió una cabecera triple con un ábside semicircular y dos absidiolas en los laterales, una bóveda de cañón con arcos fajones y se amplió la nave que se convirtió en más larga y, posiblemente, más alta.

En el exterior se hacen evidentes los contrafuertes. En la parte de los pies hay una interesante ventana geminada con un capitel de hojas de acanto sobre una pequeña columna, de las que se conservan pocas en la arquitectura prerrománica. El ábside central presenta arcuaciones lombardas y lesenas típicas de la arquitectura románica catalana. Además, la puerta central, también edificada en el s. XI, presenta una puerta adintellada decorada con un arco de medio punto inscrito en el muro que genera un tímpano hoy sin decoración.