Santuario della Verna

El lugar donde hoy se encuentra el santuario fue donado a San Francisco por el conde Orlando Cattani de Chiusi en 1213. Primero se fundó una ermita que se convirtió en un destino recurrente para Francisco y sus discípulos para períodos de meditación y oración. Francisco permaneció aquí por última vez en 1224. Precisamente con motivo de esa última visita el Santo recibió los estigmas. El complejo incluye la pequeña iglesia de Santa Maria degli Angeli construida por el propio Francisco, el corredor y la Capilla de los Sagrados Estigmas y la Basílica dedicada a Santa Maria Assunta donde se puede admirar la Anunciación del escultor Andrea della Robbia. El santuario está rodeado por el monumental bosque de La Verna, un bosque de abetos y hayas cuidado a lo largo de los siglos por los frailes franciscanos.

El santuario de La Verna es el lugar donde San Francisco recibió los estigmas. Un lugar muy querido por el santo que se refugiaba aquí en oración siempre que podía. Aún hoy reina una atmósfera mística. Si eres peregrino podrás pasar la noche en la pensión del santuario (media pensión con cena incluida). Vale la pena disfrutar del silencio del lugar una vez que los peregrinos diarios se han ido y las puertas del santuario se han cerrado. También se recomienda una visita a la biblioteca organizada por los frailes y reservada para los huéspedes de la casa de huéspedes. Vale la pena irse un poco más tarde pero después de escuchar las historias de la biblioteca.

Aquí es donde se dice que Francisco recibió los estigmas de Cristo en 1224.