Église Sainte-Croix

Esta iglesia, que está dedicada a la Santa Cruz (en latín "Santa Croce"), relaciona a su patrona con la cruz en la que murió Jesucristo. La veneración de la Santa Cruz se remonta en gran parte a Santa Elena, quien fue la madre del emperador Constantino el Grande (quien, después de su victoria en el "Puente Milvio" en las afueras de Roma, reconoció el cristianismo como religión y en 312 el largo tiempo de persecución terminó con el “Edicto de Tolerancia” de Milán). A principios del siglo IV emprendió una peregrinación a Tierra Santa (Israel/Palestina) y trajo numerosas reliquias de allí a Europa, incluida la "Vera Cruz" en la que Jesucristo fue crucificado. Por lo tanto, a menudo se representa a Helena con una cruz como atributo. La iglesia celebra la fiesta del descubrimiento de la Santa Cruz, llamada “Exaltación de la Cruz”, el 14 de septiembre.

La iglesia fue restaurada en el siglo XIX y más tarde la dependencia y antigua abadía benedictina albergó la Escuela de Bellas Artes de Burdeos, que sigue siendo hoy.

Un detalle especialmente interesante de la iglesia es el campanario. Originalmente perteneció al castillo de Bouffay, que fue demolido en 1843. El reloj situado en la torre norte se incorporó al campanario cuando éste se construyó, al igual que la campana de 8 toneladas fundida en 1663.