Sogenannte Belgienhalle (1918)

Botín de guerra a gran escala: prevalece una gran escasez de hierro durante la Primera Guerra Mundial. Para fortalecer las operaciones importantes para la guerra, las naves industriales se desmantelan en las áreas ocupadas por los alemanes y se reconstruyen en Alemania. El arquitecto Hans Hertlein eligió una sala de esqueleto de hierro en Valenciennes, en el norte de Francia, cerca de la frontera con Bélgica, para la Siemens-Schuckertwerke. A partir de esta sala capturada, se construye una fábrica de metal para la fábrica de cables de Siemens en la isla de Gartenfeld y se la denomina engañosamente Bélgica Hall. La planta está bien conectada para buques de carga a través del Canal Hohenzollern. Los trabajadores toman el Siemensbahn hasta la estación de Gartenfeld. Hasta 2002, en la sala se producían cables para energía, información y transmisión de alta frecuencia, que se amplió en 1928/29. El edificio luego sirve como almacén y brevemente como ubicación para la feria de moda Bread & Butter. En la futura isla sin coches se construirán 3.700 apartamentos y un puerto deportivo. La sala catalogada ofrece espacio para actividades comerciales, sociales y culturales. Vale la pena visitar nuestro sitio web para obtener más información sobre la historia de Berlín: industriekultur.berlin/erleben Fahrradrouten/produktion-und-munition/

La antigua torre del reloj de las obras de Siemens en Gartenfeld.