Rosaleda de piedra conmemorativa

Según Theodor Fontane, el Brunnenkirchhof era un antiguo cementerio para los huéspedes del spa. Fontane dice: "... En la antigüedad, las amplias áreas boscosas ya estaban densamente cubiertas de rosas silvestres de flores blancas, rojas y amarillas. Pero el lugar donde los rosales estaban más densos y formaban un pequeño bosque dentro del bosque se llamaba el jardín de rosas. Los arbustos desaparecieron gradualmente, pero el nombre permaneció, y los difuntos se dicen de manera significativa e informal: duermen en el jardín de rosas ". Hoy solo la piedra en el bosque de montaña nos recuerda el cementerio.
Fuente: scottyscout.com/brandenburg/wandern-fontane-rosengarten-zum-baa-see