Comienzo del sendero del Valle de la Barranca

En el Valle de la Barranca se pueden apreciar varios ecosistemas de alto valor medioambiental. Sotos en las tierras bajas, bosques ribereños, zonas de pasto, pinares, relieves de montaña y un interesante ambiente acuático en los embalses de la Barranca, formados por las presas del Ejército del Aire y del Pueblo de Navacerrada, asegurando una entretenida variedad de paisajes naturales. El nivel del agua de las dos presas que forman las aguas embalsadas de la Barranca se mantiene alto durante todo el año, ofreciendo un hábitat excepcional a una interesante comunidad de aves acuáticas. La población permanente de aves en los pequeños lagos de montaña está formada principalmente por azulones, que son los patos de superficie más vistosos y revoltosos; también hay una pequeña comunidad de somormujo lavanco, que suele buscar alimento buceando en el fondo del lago, compitiendo con multitud de peces que habitan en el embalse todo el año; y una pintoresca bandada de gaviotas reidoras que alternan residencia con el cercano embalse de Navacerrada, construido al sur de la población por el Canal de Isabel II en 1969 sobre el río Samburiel, afluente del Manzanares, para abastecer de agua potable a varios municipios de la sierra de Guadarrama. En las temporadas de migración invernal suelen hacer escala en el valle ejemplares de cormorán grande.

En el bonito valle de La Barranca comienzan multitud de rutas de senderismo. Pero La barranca en si misma es un lugar ideal para descansar, sentarse y meditar.

Esta ruta es ideal para quienes desean una caminata sencilla con vistas espectaculares a La Maliciosa, la Bola del Mundo y, a lo lejos, todo Madrid. ¡Una excelente opción para disfrutar en familia o con amigos que no están acostumbrados a caminar! 🌲🏞️