El Puente de Los Canales

Las dehesas ganaderas de Valsaín eran grandes extensiones de pastos pobladas de robles hasta que Carlos III compró el territorio, en 1761, y comenzó la repoblación forestal con pino silvestre. La mayor parte de las tierras de pastos se transformaron menos la dehesa pública del Plantío, que conserva privilegios y derechos medievales para los ganaderos locales. En este tramo aparecen los mejores restos del camino de las Pesquerías Reales. La orilla del río está reforzada con gruesos muros de mampostería para facilitar la construcción del camino y canalizar el agua del cauce, favoreciendo la formación de remansos y balsas para concentrar la pesca. En los tramos escarpados hay restos de las escalinatas talladas en las rocas del terreno y al llegar al puente de los Canales, construido en medio de un espléndido robledal, de nuevo el entorno evoca un ambiente medieval. El itinerario de la excursión atraviesa el río Eresma por el puente peatonal construido antes de llegar al arco de piedra del puente de los Canales. En la orilla derecha del río, en el nacimiento del canal acoplado sobre los pilares de piedra del puente, hay una fuente que tiene agua todo el año.

El pintoresco puente de los Canales debe su nombre al canal de troncos apoyado en pilares de granito que salva el cauce del río Eresma por encima del puente. Algunos investigadores afirman que el origen del acueducto es romano por el aspecto del arco del puente y los bloques de los pilares de granito. En realidad el canal se construyó en el siglo XVI, en tiempos de Felipe II, para canalizar las aguas del arroyo de Peñalara y abastecer de agua potable los estanques y fuentes del palacio de Valsaín. El arco del puente es de la época de Carlos V, como puede verse en el escudo imperial labrado en la sección central del arco.