Una piedra de molino tallada en la roca

La "pera furà" es una antigua cantera de muelas, obtenidas en una pared rocosa claramente visible desde la localidad de Chiampano, que a su vez se eleva justo sobre otra formación granítica aún más evidente que domina Borgone, donde desde hace años existe un acantilado de escalada.
Para llegar a la cantera, partiendo del aparcamiento del rocódromo, se siguen los dos caminos existentes a ambos lados del acantilado, llegando ambos a Chiampano, mientras que con el camino de la derecha el acceso es directo, con el de a la izquierda es necesario, una vez en la aldea, girar a la derecha por la calle principal hasta llegar a las indicaciones de pera furà.
El acceso a la cantera se realiza con un pequeño tramo de camino asistido (clavijas metálicas clavadas en la roca) y un tramo de camino en el que hay que tener cuidado de no resbalar. En cinco minutos se llega a la cueva, en cuyas paredes son claramente visibles las marcas dejadas por los canteros y unas muelas bien labradas, aún encastradas en la roca y nunca más completadas.
continuando la subida hacia Roccabruna (o Pietrabruna) se llega, tras un tramo de camino empinado, a la cima de la "pera", con una vista excepcional sobre el valle de Susa. La aldea, no muy lejos, está abandonada. En los sótanos se encuentran antiguas cubas, restos de toneles y algunos lagares, testigos de una antigua explotación de las tierras circundantes como viñedos, donde se encuentran restos de terrazas de muros de piedra seca (el topónimo "vigne del rocco" no es elegido al azar .. ..)