Camber Castle

Este edificio histórico fue construido por Enrique VIII entre Rye y Winchelsea con el objetivo de defender el puerto de Rye.

Después de divorciarse de su esposa española, Catalina de Aragón, Enrique VIII temió una invasión de España y su aliado, Francia. Construyó una serie de fuertes de artillería para defender la costa sur de Inglaterra. El castillo Camber es un buen ejemplo de estas defensas costeras Tudor. Construido en 1539, su diseño reflejaba el último diseño defensivo, con cañones coronando sus muros. El castillo costó 16.000 libras esterlinas y tenía una guarnición de 42 hombres.

Sin embargo, en esta costa también se produjeron procesos naturales. Los sedimentos fueron desplazados a lo largo de la costa por la acción del viento y las olas, depositándose aquí y desplazando gradualmente la línea de costa. Efectivamente, el castillo se estaba moviendo hacia el interior y, al cabo de unos años, las balas de cañón disparadas desde el castillo no podían llegar al mar. Se intentó realzar el castillo y aumentar el alcance de los cañones, pero la naturaleza prevaleció y el castillo se cerró en 1637.