Pertes de l'Ain

Hace varios millones de años, el Ain se perdió bajo tierra, en un laberinto de cavidades, una galería subterránea llamada "pérdidas". Con el tiempo, el trabajo de la erosión del agua ha hecho su trabajo, y ha mordisqueado la piedra caliza y destruido la bóveda de la galería subterránea. Sigue siendo hoy un paraje natural único donde el agua se abre paso entre montículos rocosos y restos de piedra.

Un camino señalizado y trazado te permite seguir el burbujeante río Ain a lo largo de estrechos y profundos desfiladeros, rocas y cascadas, todo ello rodeado de bosque.

Un breve paseo por las pasarelas y miradores que bordean el Ain después de su salida, magnífico paisaje