Place Abbatucci

PLAZA ABBATUCCI:
La historia, debajo de mi árbol.

“¡Linden, quédate quieto!”, habla el mariscal. Aquel para quien el patio de armas está destinado a soldados, y sólo a soldados. Sin árboles.
Pero la guarnición ya no existe, por lo que ahora el jardinero Vauban tiene la palabra: ¡la antigua plaza de armas está muerta, ahora los árboles están en pie! ¡Ajustado!

Desde la elegante renovación de 2013, la plaza Abbatucci está coronada por una nueva generación de tilos, como lo ha estado desde que la guarnición se fue en el siglo XIX. Un guiño a la historia: elegí la "Tilia conlata 'Rancho'", una variedad que florece en verano y se adapta al entorno urbano, en Alemania. Y cuando nos ordenan parar es sólo para disfrutar mejor de la sombra y tal vez incluso sentarnos en un banco e imaginar cómo sería un desfile militar aquí. ¡Estarse quieto!

plaza central de Huningue

La plaza da una impresión triste a pesar del monumento. Es limpio, pero apenas frecuentado.