Burgruine Rabenstein

Antiguamente había una sencilla torre de vigilancia en un alto espolón rocoso, pero cuando se fundó la Abadía de San Pablo en 1091, la torre se amplió hasta convertirla en un castillo bien fortificado. El castillo cambió de manos varias veces hasta que fue destruido en un incendio a finales del siglo XVII. Las ruinas estuvieron en mal estado durante mucho tiempo, pero en la década de 1990 los restos fueron conservados y restaurados en pedazos. Hoy puedes visitar las ruinas y disfrutar de la vista única desde las murallas del castillo.

El Rabensteiner Inn también se encuentra justo al lado del castillo. Allí no sólo se puede cenar excelentemente, sino también pasar la noche en acogedoras habitaciones o apartamentos de vacaciones.