Orologio della stazione di Bologna

El reloj se detiene a las 10.25, hora en la que el 2 de agosto de 1980 detonó una bomba que causó la muerte a 85 personas e hirió a más de 200.
Sólo en 1995 fueron condenados a cadena perpetua los autores: los que detonaron la bomba de tiempo, contenida en una maleta abandonada.

En cambio, aún se desconocen los instigadores, es decir, quienes planearon y ordenaron la masacre.

La masacre de Bolonia sigue siendo el ataque terrorista más dramático ocurrido en Italia desde la Segunda Guerra Mundial y sigue siendo uno de los grandes casos sin resolver (los instigadores son desconocidos e impunes).

Normalmente, un reloj normal de estación de tren, como los que se encuentran por todas partes, no merecería una mención especial. En este caso especial, aquí en la estación principal de trenes de Bolonia, es su triste historia lo que la hace especial: porque durante un devastador atentado con bomba en 1980 (ver la contribución de Martina arriba) el reloj se detuvo. Aunque ya no muestra la hora actual, vale la pena mencionarlo aquí como un testigo muy especial.