Monastir Santa Maria del Roure

El histórico monasterio de Santa María del Roure, en la cima de la sierra de Tramonts, guarda entre sus piedras el pasado de monjes agustinianos, peregrinaciones y hechos milagrosos que hicieron de este lugar uno de los más venerados de la comarca. El mes pasado terminó una larga restauración en la que han intervenido la Generalitat y la Diputación de Girona. La canónica espera ahora ser un referente para actividades culturales, como conciertos. También se plantea algún tipo de concesión que permita sacarle un rendimiento para conservar el conjunto. El orden de los agustinianos se instaló en este lugar, donde los restos más antiguos son de una iglesia románica. Nació el Priorato de Santa María del Roure (XIII), el que fue monasterio y santuario. Está protegido como Bien Cultural de Interés Local (BCIL).En el siglo XV, a causa de la guerra, la iglesia y otros edificios del prioriado estaban en un estado ruinoso y, posteriormente, a través de limosnas, se reparó. Sobre la iglesia románica se construyó una de estilo gótico. Ferran del Campo menciona que en el lugar se produjeron hechos milagrosos que le convirtieron en lugar de peregrinaje. La imagen de la Virgen desempeña un papel clave en su veneración.