Bastille Weimar

La Bastilla se alza como un bastión frente al palacio residencial. El conjunto de puerta de entrada, torre del castillo y casa de la dama de la corte es la parte más antigua del complejo del castillo y los restos del antiguo castillo Hornstein del siglo 16. Mientras que el castillo ducal sajón se quemó repetidamente, la Bastilla permaneció prácticamente intacta. En 1729 se levantó la torre y se la equipó con una construcción barroca de cúpula y linterna. Con el tiempo, la Bastilla también sirvió como palacio de justicia. Quizás el recluso más famoso de las salas de detención fue Johann Sebastian Bach en 1717. El entonces concertino de Weimar fue encarcelado aquí por instigación de su empleador, el duque Wilhelm Ernst de Sajonia-Weimar, después de haber aceptado un nuevo puesto como director de orquesta del príncipe Leopoldo de Anhalt-Köthen sin su consentimiento.

En el centro de la ciudad, junto al parque del Ilm, se encuentra el castillo de los duques de Weimar. La parte renacentista llama la atención junto al edificio más nuevo del castillo.

El castillo está siendo renovado actualmente, pero se puede visitar algunos días con previo aviso.