Rueda de los inocentes

En el pasado, el abandono de los recién nacidos (pero también de los niños mayores) no era un hecho sensacional: a menudo era un acto necesario para las familias muy pobres, así como un acto de conveniencia para deshacerse de los hijos ilegítimos. El abandono de la descendencia (en Venecia como en otros lugares) estaba formalmente prohibido; sin embargo, en varios lugares era posible dejar a los hijos sabiendo que serían recogidos y criados por una comunidad dedicada a este tipo de ayuda social.La Rueda de los Inocentes (o Rueda de los Expuestos) era un dispositivo giratorio, similar a una puerta giratoria, que permitía a las familias dejar a sus hijos al cuidado de las monjas en total anonimato. La madre o el padre, por la noche, colocaba el 'bulto' dentro de la rueda, tocaba el timbre y se marchaba; las monjas, atraídas por el sonido, giraron el cilindro desde dentro y acogieron al huérfano en lo que se convertiría en su hogar. Muchas veces se dejaba una ofrenda, un trozo de papel con el nombre del recién nacido y un objeto identificativo (una estampa, una carta o un pañuelo partido por la mitad), en caso de una posible redención futura del niño.En particular, esta rueda formaba parte del convento-orfanato Pio Ospedale della Pietà, una estructura que acogía entre 4.000 y 5.000 niños. Hoy la puerta está integrada en el lado izquierdo del Hotel Metropole y en su interior se puede vislumbrar la barra: ya no es giratoria y tiene ventanas que originalmente no estaban allí, para garantizar el anonimato.it.wikipedia.org/wiki/Ruota_degli_esposti
it.wikipedia.org/wiki/Pio_Ospedale_della_Pietà

Bonito lugar inmerso en la laguna.