Château de Carrouges

El castillo de Carrouges fue construido a finales del siglo XIV para servir como residencia señorial.

A lo largo de los siglos, el castillo ha sido remodelado y actualmente está gestionado por el Centro de Monumentos Nacionales, que lo restauró.

Es posible visitar el castillo y su parque mediante una visita autoguiada o una visita guiada.

Siete siglos de historia. Carrouges fue primero en el siglo XIV un bastión de la Guerra de los Cien Años (calabozo). Se convirtió en una casa señorial en el siglo XV (ala Blosset), ampliada en el siglo XVI por una puerta de entrada considerada el primer testimonio de la arquitectura renacentista en Normandía. Fortificado nuevamente durante las Guerras de Religión (baluardo oeste), su función como residencia prestigiosa fue confirmada por la construcción a fines del siglo XVI de dos alas "clásicas" y las escaleras que conducen a ellas, diseñadas por el arquitecto François Gabriel.

Anfitriones famosos. Los señores de Carrouges recibieron al rey Luis XI en 1473 y luego a Catalina de Medici y su séquito en 1570.

El castillo es uno de los más grandes de Normandía. Catalogado como monumento histórico en 1927.
Desde el aparcamiento gratuito, un camino de grava conduce primero a una puerta de entrada y luego al castillo cuadrado, que se alza tan fortificado como representativo junto al pequeño jardín del castillo y a un pasto para el ganado. Más allá del castillo se extiende el bosque de hayas y robles del Forêt d'Ecouves, que forma parte del Parque Natural Regional de Normandía-Maine.

En su interior, el castillo de Carrouges le invita a viajar en el tiempo a través de tres siglos. Son especialmente bonitos el comedor con chimenea de mármol o la sala del obispo con su cámara de oración revestida de madera.