Burg Brüggen

La nobleza nunca vivió aquí, pero algunas de las antiguas fortificaciones aún se pueden ver y algunas también se pueden visitar.
Además de un baño público, hay una tienda de alquiler de bicicletas en el patio, que también tiene nueve bicicletas eléctricas disponibles. La torre de cuchillos está bien conservada y ahora alberga una pequeña tienda de recuerdos. También se conservan las casamatas del muro. Otras instalaciones, como antiguas murallas, edificios y caminos, son fáciles de descubrir en un paseo por el pintoresco centro de Brüggen. Vale la pena ..

Construido por los condes de Kessel en el siglo XIII para asegurar un vado a través del Schwalm, pasó a manos de los duques de Jülich a principios del siglo XIV, quienes reemplazaron el edificio existente con un fuerte de ladrillo. Después de que Brüggen fuera ocupada por las tropas francesas en 1794, fue vendido a un particular bajo el gobierno francés a principios del siglo XIX y hoy alberga un museo, entre otras cosas.

Brüggen es una ciudad con historia que bien merece la pena ver.