Castelluccio

Castelluccio es un excelente punto de partida para espléndidos paseos por el campo: más allá de la Madonna del Faggio, un pequeño santuario del siglo XVIII inmerso en un hayedo, es posible llegar al pueblo de Tresana, el Rifugio di Monte Cavallo, el Prati del Piella , Pian dello Stellaio, el Molino de Taccaia, y muchos otros lugares interesantes gracias a la red de caminos bien señalizados.
El sugerente pueblo medieval está situado sobre una cresta de 800 metros de altura, desde la que se puede disfrutar de una hermosa vista sobre todos los valles circundantes.
En Castelluccio son interesantes las bóvedas, los jardines colgados de terrazas y la iglesia de Santa Maria Assunta.
A la entrada del pueblo se encuentra el Castillo de Manservisi, con sus imaginativas líneas, ejemplo de esa arquitectura “romántica” que estaba de moda a finales del siglo XIX.