Innsbruck Altstadt

Los ciclistas de montaña y de descenso dan forma a la imagen de la ciudad: los ves por todas partes; por la mañana, al mediodía, después del trabajo. Innsbruck y andar en bicicleta simplemente van de la mano como las albóndigas de tocino y el chucrut. A propósito: Innsbruck también merece la pena después de andar en bicicleta. Puedes disfrutar de deliciosa comida desde tradicional hasta internacional y en los días de lluvia puedes simplemente ir al cine. Esta combinación única de aventura alpina y estilo de vida urbano es lo que hace que Innsbruck sea un destino para bicicletas tan especial.

¿Qué tal un pequeño “paseo nocturno digestivo” por la ciudad después de la cena? Un paseo en bicicleta por la ciudad revela particularmente bien su belleza. En Innsbruck, pasará por antiguas murallas, museos, iglesias y lugares de interés como el Palacio Imperial, la Hofkirche y el famoso Tejado Dorado.

Un hermoso casco antiguo con estilo 😍.
Muchos cafés, tiendas y una vista increíble de las montañas.

El casco antiguo de Innsbruck con su paisaje montañoso no es para burlarse.