Gazimestan - Schlacht auf dem Amselfeld

La batalla, en la que murieron tanto Lazar como Murad, fue crucial para el paso de Serbia al vasallaje del Imperio Otomano en los Balcanes. En los tiempos modernos, sin embargo, se estableció un mito nacional serbio con el evento, que se percibió como una derrota, el campo del mirlo o el mito de Kosovo. Aunque la batalla terminó sin un claro vencedor, al caer los líderes de ambas fuerzas armadas, el resultado fue que la resistencia de los príncipes serbios contra un oponente militar o numéricamente superior se rompió por el momento.[5] Por lo tanto, tuvieron que reconocer la soberanía de los sultanes otomanos, lo que obligó al principado serbio restante a pagar tributo, aunque Vuk Branković y Đurađ Branković en particular resistieron durante mucho tiempo después de la batalla. Esta batalla fue posteriormente glorificada como el mito nacional de los serbios. En 1459 Serbia finalmente fue conquistada por los otomanos y permaneció como parte del Imperio Otomano hasta 1804.La torre tiene una inscripción en la base que se originó en el llamado mito de Kosovo. Según la leyenda, es el "Juramento de Kosovo" escrito por el príncipe Lazar a partir de una canción popular de Vuk Stefanović Karadžić. Este "juramento" para las próximas batallas consiste casi en su totalidad en maldiciones contra la traición, dirigidas a aquellos que no tomarían parte en la batalla. Los traidores están condenados a quedarse sin posteridad, parias para siempre. El juramento aparece como un encantamiento para evitar la traición con una amenaza de maldición. La mayoría de las canciones relacionadas con el llamado mito de Kosovo fueron escritas durante el siglo XIX, la era del nacionalismo europeo, lo que explica que en algunas de ellas ya se puedan encontrar huellas de una transición al nacionalismo. La lealtad al príncipe y la fe ya no se dan como la razón para ir a la batalla en Kosovo, sino más bien una obligación con los antepasados serbios, la sangre serbia y la educación serbia, que forman la base del juramento hecho a Lazar. Fue solo en las canciones de Karadžić que la elección de Lazar entre una muerte honorable y una vida de vergüenza cambió a la elección que conocemos hoy entre los "reinos terrenales y celestiales". El acento del juramento en el mito de Kosovo pasó de lo religioso a lo político, porque al héroe que se sacrifica no sólo se le promete fama y vida eterna. También se promete la continuidad eterna del reino, que es el punto de referencia de las aspiraciones nacionales.Fuente: Wikipedia