Chapelle Saint-Arbogast - Auberge du Gros Chêne

Según la tradición, Arbogast vivió como ermitaño en el bosque de Haguenau en el siglo VII, cerca de un gran roble. Su estilo de vida ejemplar lo llevó a ser nombrado obispo de Estrasburgo. De hecho, Arbogast puede considerarse una fuerza importante en la cristianización de los alamanes. Fundó el primer monasterio alsaciano en Surburgo, y en Estrasburgo hizo ampliar la iglesia dedicada a María en el sitio de la catedral actual. Pero probablemente nunca vivió en el bosque de Hagenau. De hecho, hacia finales de la Edad Media, los ermitaños se establecieron en el bosque llamado "La Forêt Sainte" y cerca del "Gros chêne", el gran roble.
El gran roble, que estuvo en este lugar durante varios cientos de años, cayó al suelo después de ser alcanzado por un rayo en 1913. Su tocón ahora está protegido por un pequeño techo de metal. La piedra conmemorativa data del siglo XIX, la capilla Arbogast de 1955.

Hay amplias plazas de aparcamiento y un restaurante cercano. Hay varias opciones para sentarse en la zona y un arroyo serpentea por el bosque.
Los senderos forestales fueron asfaltados nuevamente en 2020. ¡Un sueño en bicicleta!

Bonito destino intermedio para un viaje en familia: cervecería al aire libre/restaurante, gran parque infantil y parque infantil.