Pěchotní srub K-S5 U potoka

Una fortaleza militar construida en 1936 como parte de la construcción de una línea de fortalezas fronterizas. Además de los edificios circundantes K-S 2 a K-S 9, los empleados de la empresa civil Ing. Karel Skorkovský de Praga.Esta empresa establecida tenía una amplia experiencia en la construcción de estructuras de hormigón, lo que probablemente fue una de las razones por las que tuvo éxito en el concurso para la construcción no solo de este edificio de fortificación subfronteriza, sino también de otros, como el Hůrka. Fortaleza de artillería na Králíkami.El ritmo de construcción fue relativamente rápido, la empresa tuvo 250 días para construir todo el tramo. El hormigonado del edificio K-S 5 en sí tuvo una duración de seis días, mientras que el procesamiento de un total de 1756 m3 de hormigón armado no se pudo interrumpir para no reducir su futura resistencia mediante la formación de juntas. Por la misma razón, toda la construcción estuvo acompañada de esfuerzos para maximizar la limpieza del material de construcción y también la máxima calidad de mano de obra, que también fue verificada por los supervisores militares de la construcción.Aunque fue realizado por empresas civiles (el equipo interno fue instalado principalmente por empresas civiles, por ejemplo, la empresa de ventilación con filtro Tresoria Praga, la empresa de plomería Hygiea de Ostrava, la empresa de cañones antitanques Škoda Plzeň), desde el principio fue un edificio puramente militar, que estaba estrictamente clasificada y no obstruida a los registros de la propiedad. Los trabajadores tenían pases especiales para la construcción, y todo intento de espionaje o sabotaje era severamente castigado. Los lugareños también tuvieron una vida más difícil con la llegada de las fortificaciones: no podían cruzar sus campos directamente a través de la línea, sino a través de pasajes en obstáculos, y lo más importante, todas las reformas de edificios o alteraciones notables cerca de las fortificaciones tenían que ser aprobadas por el militar.Desde 1938, el edificio ha recibido una dotación permanente de 37 hombres (pero la mitad de ellos siempre estuvieron en los cuarteles). El objeto estaba armado con un total de dos cañones antitanque calibre 47 mm, siete ametralladoras pesadas vz. 37 calibre 7,92 mm y al menos seis ametralladoras ligeras vz. 26 calibre 7,92 mm. Aquí se instaló una ventilación filtrante con filtros de gas, un generador diesel para la producción de electricidad, una bomba de agua sobre un pozo de 28 metros de profundidad, un suministro de alimentos de hierro y un suministro de municiones. El edificio estaba conectado con el fondo y los edificios circundantes por teléfono. Lo único que faltaba eran los pisos de las campanas de observación y el soporte para la ametralladora pesada en la campana central, desde donde debería ser posible disparar a las unidades enemigas que se aproximan por la carretera de la Baja Moravia. Los pisos se pueden reemplazar fácilmente por otros de madera, el carro solo se puede reemplazar de forma limitada, por ejemplo, una mesa de tiro para una ametralladora ligera.Después de verse obligado a abandonar el edificio sin pelear en octubre de 1938, la historia de KS 5 está rodeada de misterio durante varios años, por lo que solo podemos especular por qué el edificio, a diferencia de prácticamente todos sus vecinos, no estuvo expuesto a pruebas importantes de alemán. explosivos de artillería o ingeniería. Según la lista sobreviviente de la posguerra del ejército checoslovaco, el único daño, incluso menor, fue visible en las campanas de acero fundido. Los objetos circundantes, por otro lado, a menudo tenían paredes delanteras o traseras completamente disparadas, lagunas rotas de las armas principales, etc.La suerte de K-S 5 abandonó las tres campanas en 1956, cuando los trabajadores de la empresa nacional Kovošrot fueron desarraigados o fusilados. La chatarra obtuvo así unas 60 toneladas de fundición de acero de calidad a costa de dañar el edificio.En este punto, el edificio perdió gran parte de su valor de combate y creció gradualmente hasta 1994, cuando fue ocupado por un grupo de estudiantes para construir un museo de las fortificaciones checoslovacas y llevarlo gradualmente a un estado lo más cercano posible a 1938. Poco a poco, dos de las tres campanas que hay en el techo del edificio, el edificio está continuamente equipado con equipamiento de época, por lo que hoy (2006) es posible ver una sala de tiro prácticamente equipada, incluyendo ametralladoras y, desde mediados de 2006, el original cañón antitanque. En la planta inferior es posible ver un generador diesel funcional para la producción de electricidad, una bomba Kunz original funcional, un baño equipado, cuartos de suboficiales, etc.Además, se instalan varias exposiciones para iluminar el tema no solo de las fortificaciones checoslovacas de antes de la guerra, y no debemos olvidar la pequeña exposición sobre el tema de las fortificaciones checoslovacas de posguerra, que pocas personas conocen hoy.De mayo a octubre, K-S 5 está abierto al público regularmente los fines de semana, y también es posible comprar literatura o pequeños recuerdos sobre el tema de las fortificaciones. Puede encontrar más información sobre los horarios de apertura y el edificio en sí en www: k5.sweb.cz.
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Fortaleza militar: búnker construido en 1936 durante la construcción de las fortalezas fronterizas de la línea. La construcción básica del objeto KS 5 duró seis días, mientras que no se pudo detener el procesamiento de un total de 1756 m3 de hormigón armado, para no reducir su futura solidez de juntas de resistencia. Por la misma razón acompañó todo el esfuerzo constructivo por la máxima pureza de los materiales de construcción y también por la máxima calidad de la mano de obra, que también controló el personal militar de supervisión de la construcción.
Este objeto, al igual que otros objetos de este tipo en la República Checa, nunca se utilizó en ninguna batalla. Ahora hay un museo en esta fortaleza.