La vía verde de los Montes de Hierro es el complemento perfecto a la magnífica red de carriles bici que se teje alrededor de Bilbao. El recorrido atraviesa una espectacular zona montañosa de tupidos bosques verdes en cuyas entrañas se esconde un valioso pasado industrial y minero.

La Ruta comienza en la estación de Traslaviña, a la que puedes llegar en tren desde la capital vizcaína. El trazado —por donde bajaba el tren cargado de mineral de hierro y otras materias primas— te lleva durante unos 47 placenteros kilómetros a través de la espesura de las montañas de la costa vasca hasta el mar. En el recorrido vas a pasar por estructuras construidas para la explotación minera como antiguos cargaderos, estaciones de tren, puentes y túneles.

Completar la vía verde de los Montes de Hierro en un solo día es posible para cualquier ciclista que tenga un estado de forma medio. Sin embargo, en esta Colección te propongo dividirla en dos etapas que te permitan pedalear en familia y saborear cada rincón de los preciosos parajes que te vas a encontrar.

Por otro lado, la posibilidad de volver en tren a Bilbao al final de cada jornada hace que no sea necesario buscar alojamiento ni transportar más equipaje que el que puedas necesitar en un día. De este modo he añadido una variante al final que te lleva a descubrir otro de los carriles bicis de la zona.

Otro de los incentivos de esta Ruta, aparte de pedalear por un precioso entorno natural y rural, es poder enlazar las montañas con la costa. Terminar el recorrido rodando por la playa de La Arena, subir a los acantilados y contemplar el Cantábrico y volver por carriles bici a la estación de tren de Muskiz, bordeando el río Barbadún, son una iniciación perfecta en el cicloturismo.

El itinerario comparte, casi a partes casi iguales, vías pavimentadas con caminos de grava. Por este motivo, es preferible que utilices, al menos, una bicicleta híbrida que se adapte a este tipo de superficie. Una bicicleta de gravel se antoja como la montura perfecta y una de montaña hará el trabajo perfectamente. Sobre todo recuerda llevar algunos repuestos y tener la bici en buen estado.

La temporada ideal para esta aventura abarca desde finales de primavera hasta principios de otoño. Cada estación tiene su encanto. En la primavera la vegetación comienza a brotar y las flores están en todo su esplendor. En verano la temperatura es templada, los días son largos y cabe la posibilidad de darte un baño en la playa. En otoño los bosques se vuelven jugosos y dorados. Sea cual sea tu estación preferida, asegúrate de revisar la previsión del tiempo para evitar la lluvia. Pero siempre lleva contigo un chubasquero ligero, ya que la costa vasca es así de verde por su frecuente precipitación.

Este antiguo trazado ferroviario convertido en vía verde, a la que te puedes desplazar en trenes modernos y enlazar montaña y playa, te da una sensación de viaje concentrada en dos intensos días de pedaleo en familia. Disfruta de los Montes de Hierro.