Église Saint-Étienne

En origen, el edificio románico tenía planta de cruz latina con absidiolo en cada brazo del crucero y de una sola nave. Una primera intervención se realizó en época gótica, quizás después de la Guerra de los Cien Años, al menos en la bóveda del brazo sur del crucero y los vanos. El edificio sufrió muchos daños durante las Guerras de Religión (huellas de fuego al norte; mutilación de las partes superiores del crucero; reconstrucción del santuario con un ábside plano). La presencia de sillería en el coro, que no es anterior al siglo XVIII, da fe de la función de priorato conventual todavía en aquella época. Se le atribuyeron trece canónigos regulares de la orden de San Agustín. En el siglo XIX nació el proyecto de construir un campanario que sirviera de punto de referencia para los barcos que navegaban por la Gironda. A partir de 1857 se reconoce como imprescindible la ampliación de la iglesia y la construcción del campanario. Se mantiene el proyecto del arquitecto Alaux y se encomienda la obra escultórica del nuevo campanario-pórtico al escultor Aristide Belloc. La antigua fachada fue demolida para dejar paso a la misma. La bahía occidental de la nave se ha alargado. El ábside se aplanó y sólo se conservó el absidiolo sur del crucero. Los antiguos elementos exteriores se encuentran en estado residual. En el interior, en el crucero del crucero, se conservan los haces de columnas románicas. Los capiteles esculpidos dan testimonio del edificio original (animales enfrentados, palmetas de follaje estilizado, follaje, entrelazado). En el brazo sur del crucero, una moldura apoyada sobre capiteles con figuras y un capitel rebajado decorado a tres caras con salidas de nervaduras, atestiguan las restauraciones y levantamientos del crucero a finales de la Edad Media (siglo XIV o XV) .