En ocasiones, no hace falta viajar en avión, ni durante varias horas en coche para descubrir paisajes naturales realmente bonitos. Tal vez tengamos muy cerca de casa lugares sorprendentes a los que nunca nos hemos planteado darles una oportunidad. Consideramos que lo lejano obtiene mayor valor, pero a veces estamos completamente equivocados.

¿Te imaginas tener la oportunidad de visitar una de las cadenas montañosas más importantes de Europa sin salir de Albacete? Pues bien, esta provincia, además de cuchillos y navajas, también atesora rincones naturales únicos. Entre las maravillas que vas a ver destacan: la Suiza manchega en Aýna, las cascadas de película como las del Batán y los cañones de vértigo de Liétor.

Esta Colección recorre el sendero GR 67 de Alcaraz a Hellín. Desde el kilómetro 0, las altas montañas de la sierra de Alcaraz te rodean y los ríos Alcaraz, Madera y Bogarra se van relevando para guiarte por sus entrañas. En la Etapa 3, te encuentras con el protagonista de esta Colección, el río Mundo, que será tu compañero hasta el final de esta aventura.

Este itinerario fue en su día la frontera entre Al-Andalus y Castilla, un recorrido muy emocionante que te muestra las señales que han dejado estas dos interesantes culturas. Alcaraz, Paterna de Madera, Bogarra, Aýna y Liétor son un claro ejemplo.

El GR 67 utiliza sendas, pistas de tierra y asfaltadas. Salvo algún tramo con algo de arena y piedra suelta, en general, el recorrido se encuentra en buen estado. Debido a las largas etapas que componen esta Colección, es preferible un nivel físico medio para disfrutar al máximo de la experiencia. Siempre puedes adaptar las jornadas a tus necesidades, pero debes tener en cuenta que te encuentras en una zona poco poblada y, por tanto, las posibilidades de encontrar alojamiento y víveres son reducidas.

Puedes embarcarte en esta aventura en cualquier época del año. Si te gusta ver un paisaje colorido y disfrutar de temperaturas agradables, la primavera es una buena opción. El otoño tiene características similares, pero la vegetación se viste con tonos más apagados. En cambio, tanto el invierno como el verano, se caracterizan por tener temperaturas extremas. Dependiendo de tu preferencia, escoge tu época favorita y prepara el equipaje adecuado.

Todas las etapas finalizan en poblaciones donde puedes hospedarte y conseguir víveres. Esto te librará de cargar unos cuantos kilos extra en tu mochila. La mayoría de fuentes del recorrido no son de agua potable, así que te recomiendo llevar un filtro o pastillas potabilizadoras para evitar cualquier imprevisto. Carga también con algún snack, una gorra y crema solar.

Para mayor accesibilidad a la Ruta, Alcaraz y Hellín disponen de estación de autobuses. Otra opción sería llegar a Alcaraz en vehículo propio y realizar la vuelta desde Hellín, que también cuenta con estación de tren.

Tan solo me falta desearte una buena travesía. ¡Disfruta del viaje!