Enfrentarse a la alta montaña significa abrazar la incertidumbre, desafiar tus límites y llevar al extremo tu resistencia. Sin embargo, también supone dejarse llevar por los olores, disfrutar de cada sorbo de agua, admirar la naturaleza en su estado más puro y sumergirse en un profundo sentimiento de satisfacción personal. Rodearse de nubes, valles y cumbres es una excusa perfecta para llenar un poquito más los pulmones y ponerle más ganas a una extenuante subida.

La península ibérica está llena de lugares que te regalan esas sensaciones. Uno de los más salvajes, puros y hermosos es el parque nacional de los Picos de Europa, situado entre León, Asturias y Cantabria.

Los tres macizos que componen el parque esconden rincones alucinantes. Esta Colección se centra en el de los Urrieles —también conocido como macizo Central—, que tiene la suerte de albergar las cumbres más altas del parque. En concreto, hay 38 picos por encima de los 2500 metros de altura. Entre ellos destaca Torrecerredo, el picu Urriellu y la torre de la Palanca.

La Ruta que te propongo tiene como objetivo principal Collado Jermoso, en León. Se trata de un precioso balcón natural situado a 2064 metros de altura, sobre el valle de Valdeón. El itinerario tiene menos de 19 kilómetros y casi 2000 metros de desnivel positivo. Lo he dividido en tres etapas para mayor comodidad, pero puedes hacerlo en dos o incluso en una si estás en muy buena forma.

La dificultad de esta Colección reside en el gran desnivel a superar en tan poca distancia y en la presencia de varios tramos técnicos. Tanto la primera como la tercera jornada son asequibles para cualquier persona con cierta experiencia. No obstante, la segunda jornada —que es completamente opcional— requiere de habilidades técnicas, pues hay que realizar algunos pasos expuestos. Por este motivo, no recomiendo este recorrido a principiantes o familias. En cualquier caso, te animo a leer la descripción de cada etapa para saber más detalles.

El punto de inicio y fin de la Ruta es Cordiñanes de Valdeón. Se trata de un pueblo muy pequeño y remoto, así que la opción más cómoda es ir hasta allí en coche.

La mejor época para realizar este circuito es entre primavera y otoño. En invierno, la nieve podría dificultar muchos pasos o hacerlos más técnicos de lo normal. Comprueba la predicción meteorológica antes de iniciar la aventura, independientemente de la estación del año en la que vayas. El tiempo en alta montaña es muy cambiante.

Dependiendo de tus preferencias de pernocta, deberás cargar tu mochila con ciertos artículos. Si decides dormir y comer en el refugio de Collado Jermoso (colladojermoso.com/precios/), debes reservar con antelación y cargar con el saco de dormir. Si, por el contrario, decides acampar y llevarte tu propia comida, hay vivacs en los alrededores del refugio donde puedes montar tu tienda de campaña. No subestimes las temperaturas: incluso en verano hace mucho frío por las noches. En cuanto al agua, podrás rellenar las botellas en la fuente que hay junto al refugio.

Por otro lado, no olvides llevar una muda seca para cuando llegues al final de la etapa, un chubasquero, algo de comida y, por supuesto, los bastones de trekking.

Prepárate para una experiencia que te dejará sin aliento. ¡A por todas!